Estoy cansado de que todo sean tan repetitivo. Es una sucesión de mierda y más mierda. Estoy harto, exhausto, no puedo más. Mi vida es un bucle de decisiones mal tomadas, oportunidades que escojo y no me aportan y oportunidades que dejo pasar y seguramente habrían sido mucho más fructíferas. ¿Cómo puedo estar tan seguro de que esas hubieran sido mejores? Preguntaría alguien. Bueno, desde luego esto a peor no podría ir. Al menos habría sido diferente. Lo intento todo, reflexionar, analizar, cambiar, salir de mi zona de confort, probar cosas nuevas... Es que no lo entiendo. Me he atrevido, he hecho cosas que hace años ni pensaría, he dado oportunidades a miles de situaciones sólo por dejarme llevar, por no darle vueltas. Y siempre es la misma mierda. No puedo soportarlo más. Me siento solo, estupido, inútil, reemplazable. Nadie me busca, nadie quiere saber cómo estoy, nadie quiere ayudarme, apoyarme, ni siquiera verme. No tengo prácticamente a nadie en mi vida. Todo el mundo da excusas que creen que me trago. Lo más gracioso es cuando algunas de estas personas se quejan de que no las busco suficiente... ¿¡YO!? Basta, de verdad.
En absolutamente todo hago las cosas mal. Si doy tiempo, si no lo doy, si intento no agobiar o intento estar ahí. Da igual. Mal, siempre mal. Cuando ya de por sí todo te va tan mal en tu vida, lo único que necesitas es alguien que te apoye, que te ESCUCHE al menos. Nadie quiere pasar ya tiempo conmigo. Estoy cansado de sonreír falsamente, de poner tanto de mi parte, de escuchar y que no me escuchen, de que no haya ni una cosa que a la gente le parezca bien. No puedo más. Estoy totalmente agotado. En todos los sentidos de la palabra, porque apenas duermo. Vivo en un constante vaivén entre ansiedad y medio tranquilidad. Es insoportable. Echo de menos tener un amigo especial que viva aquí y en el que pueda confiar, con el que pueda hablar de todo. Echo de menos tener una pareja con la que hacer lo mismo. Pero estoy cansado de conocer gente en todos los sentidos, no sirve de nada, no se quedan, no se interesan. Y yo hago lo posible por sacarme de casa, por abrirme a todo tipo de situaciones y de gente, pero me agota tanto todo el proceso de empezar a conocer a alguien... La gente ya pasa. La misma sensación recorre todo el rato mis pensamientos: agotamiento. No sé cómo salir de esto.